Otro fin de semana ya pasado, el tiempo vuela, Septiembre ya asoma el hocico.
Este sábado los habituales 12 kms. hasta depósitos Cuyences, sin más historia.
Lo bueno de este finde vino el domingo. Donde por falta de tiempo y por probarme un poco decidí hacer el recorrido por pista finladesa de 10 kms. a un ritmo alto. Y creo que me salió bastante bien, haciendo un tiempo de 51:05 para esos 10 kms. que incluyen la subida hasta la pista finlandesa. Hasta ese punto, km. 2 llevaba 11 minutos, lo cual ya era mi mejor tiempo en esa zona nunca hecho, y paso siempre que corro de día por ese punto. Con la parte más dura superada a ritmo de 05:30 el km. nos cargamos de moral para mantener un ritmo vivo, casi de competición. Y así fui batiendo los registros intermedios uno tras otro. La vuelta se hizo algo durilla por momentos, acusando logicamente el ritmo. Normal, en carrera también se sufre, y bastante más.
Si descontamos esos 11 minutos de los 2 kms. iniciales, salen 40 minutos justos para 8 kilómetros más o menos llanos por pista finladesa. Osea, justo a 5 minutos el kilómetro. Lo cualme satisface enormemente, porque antes no podía llevar esos ritmos tanto tiempo seguido. En esto también he notado que gané bastante fondo. Y me anima a pensar que entrenando como hasta ahora podré llegar a la Media de Trubia con un fonde que me permita correr los 21 kilómetros a un ritmo lo más cercano a esos 5 minutos pelados por kilómetro.
Contento por tanto. Ahora a empezar a cuidar un poco alimentación, a ver si conseguimos bajar un poco los excesos de estos días veraniegos de bocata, helados, dulces, que cuanto menos peso tenga que soportar en Naranco mucho mejor.
Saludos correnderos.
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