Inmejorable ensayo.

Nuevo subidón de moral, y nueva carga de fuerza para seguir entrenando con asiduidad, tras el entreno de esta mañana.

Al tener que estar el fin de semana entero en casa, por reposo de mi hijo mayor que se operó el jueves de estrabismo, hoy, con la nena fuera de casa con abuelos, decidimos salir a correr a una hora más habitual de otros runners, y muy habitual de las carreras, las 11 de la mañana. Además, así practicaba si el desayuno realizado, en el que tomé bastante miel como novedad, me servía de cara a futuras carreras.

Y a pesar de ser la tercera salida seguida, tras los 10 kms. del viernes y los 12 kms. de ayer, nos decidimos por hacer un entreno rápido, intentando batir el tiempo que tengo para el circuito de 12 kms. (tiempo que estaba en 01:03:33). Por ello salimos en manga corta, pantalón corto, y las Mizuno calzadas.

¿Y qué sucedió?. Pues que ya en km.2, tras la subida de 1 km. a pista finladesa, pasé en el mejor tiempo que nunca hice en ese lugar, y ya pasé muchas veces. 10:35 en ese kilómetro 2. Ya con margen por tanto. Luego, como sólo tengo controlado en recorrido el siguiente kilómetro, compróbe que lo hice en menos de 5 minutos, e intenté por tanto mantener ese ritmo. Creo que lo conseguí, y llegué a punto intermedio, kilómetro 6 por debajo de la media hora, 29 minutos largos. Pensé entonces que podía rondar la hora en este entreno, e incluso, porque no, bajar de ese guarismo.
Pensé que podía acusar esfuerzo en segunda parte de recorrido, pero para nada, me sentí fuerte y bien, incluso con muy buenas sensaciones por momentos.

Ya en final de pista finlandesa, comprobamos que ese último kilómetro de esa pista lo había hecho también por debajo de 5 el km. Y ya quedaba la cuesta abajo hasta poco menos de un kilómetro hasta casa. Me lancé sin contemplaciones, buscando machacar el crono. Cuando pasé por kilóemtro 11 ya era plenamente consciente de que iba a bajar bien de la hora de carrera, y me llené de moral y fuerza para seguir dándole pedal al tema. Llegué a los últimos 300 metros de dura subida hasta casa con fuerza, y subí mi calle a un gran ritmo y pletórico, la verdad. Lo que ayuda la cabeza en estas cosas.

Tiempo final de 58:15 (04:51 el kilómetro) que me hizo casi frotarme los ojos. Había mejorado 5 minutos y 18 segundos mi mejor tiempo en este recorrido, que ya había hecho bastantes veces. También he de decir que a tope lo había hecho pocas veces, pero lo dicho, nunca lo había hecho en menos de la hora y 3 minutos.

Creo que la hora ayudó, correr a las 11 horas ayuda, al estar desayuno ya totalmente digerido, igual cuando salimos a las 9 horas el cuerpo está más pesado aunque no lo notemos.

Pero también pienso que en el otro lado de la balanza está el que este era el tercer entreno seguido, al acabarlo llevaba 34 kilómetros en 3 días realizados.

Lo dicho, sigo flipando, es la verdad. Ya que este recorrido para nada es llano en su principio y final, y llevo una carga de moral enorme para poder seguir entrenando fuerte, y llegar con ganas de hacer un buen tiempo en la próxima carrera que disputaré, el Villa de Gijón del 18 de Noviembre, precisamente de 12 kilómetros. Ya vemos que podremos estar en 57 minutos sin muchos problemas al ser carrera llana, y a partir de ahí, a ver cuanto podemos bajar el crono.

Saludos flipaderos.