Aunque aún no tenga los datos de la clasificación, me pueden
las ganas de empezar ya a darle vida a este blog en 2013. Por lo que me lanzo a
escribiros la crónica de la XI San Silvestre de Pravia, celebrada la mañana del
pasado día 30 de Diciembre del ya finiquitado 2012.
Mucho ambiente correndero en Pravia, más que nunca, batiendo
récord de participación, a la espera de los datos clasificatorios con los
llegados a meta. Y esta fue la tónica en toda la región, con aumentos de
participación en las San Silvestres muy destacados. Sin duda, una genial noticia.
La salida se dio en la calle Prahúa, ya en las afueras casi
de la villa. Y empezamos a trotar por un terreno de falso llano, que al poco se
convirtió en bajada cada vez más pronunciada.
Bajada en que empecé a aumentar el ritmo inicial, pasando ya corredores,
y siendo a auténtica tumba abierta en el tramo final de mucho desnivel. Me dejé
llevar en plan carrera de montaña, mientras el resto de corredores retenía, y
pasé a muchos como un avión. Por suerte fue buena táctica y no pagué esfuerzo
en el llano siguiente. Llano que transcurría por una senda asfaltada entre plantaciones
de kiwis. Hasta aquí, en torno a kilómetro y pico iba todo muy bien. Miro para
atrás para ver si seguía detrás mi suegro, y me dice que tire. Sigo al mismo
ritmo pero él se debe ir quedando de mí poco a poco.
En torno a km. 2, a punto de llegar al prado del Xiringüelu,
el dorsal (que era adhesivo, de pegar a camiseta), se me despega casi del todo,
quedando colgando por un solo lado. Le doy palmadas, lo aprieto bien contra el
pecho de nuevo, y pongo un ojo en él porque temo se me pueda caer en cualquier
momento. Y efectivamente, unos metros más adelante sin poder remediarlo, dorsal
al suelo… Frenazo, dos pasos atrás y recogerlo. Resto de carrera fue en la
mano.
Tras la zona del Xiriguelu se accede a nueva senda, esta vez
de tierra, paralela al río, que desemboca en la parte baja de la villa
praviana. Mantuve ritmo en esta zona, sin pasar a casi nadie y sin ser casi
pasado. Llegamos a recta donde antigua
azucarera de Pravia, con llegada al tremendo repecho final de unos 200/300
metros que se hace muy duro. Se corona el repecho, y quedan poco más de 100 metros a meta, que hacen que todo el mundo llegue muy justito, porque no da
tiempo a recuperar fuelle del esfuerzo anterior.
Me intento poner dorsal antes de la meta, y casi se
va al suelo de nuevo. Así que acabo pegándolo a escasos 10 metros de la llegada.
Y tras esto paro el crono en unos sorpresivos 21:12. Que al final tendría su
explicación porque la carrera no llega a los 5 kms. anunciados, si no que está
en el entorno de los 4.800 metros. De todas formas creo que buen tiempo,
consiguiendo rodar a un ritmo de 04:25 para esos 4,8 kms. Más si cabe que el
repecho final hace pupita y es muy difícil en él rodar por debajo de 5 el km.
Buenas sensaciones por tanto. Gran broche al año de mi vuelta
al mundo correndero. Y con más ganas que nunca de seguir entrenando y porque no
mejorando.
Os dejo una captura de satélite del recorrido de la prueba:
Cuando tenga la clasificación de la prueba, la subiré al blog, y haré nueva entrada con ella. Espero sea pronto.
Saludos sansilvestreros.
Por cierto, hubo unos 70 accesos al blog desde google con búsquedas relacionadas con esta Sal Silvestre. Espero que todos los que hayan accedido buscando información de la misma, haya podido conseguirla.
ResponderEliminarUna muestra más del poder de un blog bien actualizado. Aunque yo por mi parte sigo flipándolo...
Mi San Silvestre de Oviedo:
ResponderEliminarResumiendo, pachanga total. No pensaba ir, pero me convencieron mi hermano y mis primos. Demasiada gente, por lo que estuve más pendiente de no pegarme una leche que de correr; de hecho, un "figura" decidió subiendo Toreno que no quería correr más, y hala, se tira a la izquierda andando y yo que venía me lo trago... resultado, una rodilla tocada.
En fin, que al final llegué el 947 con un tiempo oficial de 25:17, que no está mal vistas las precauciones que tuve que tomar. Por cierto, los bolardos que ponen en las aceras para que no aparquen los coches peligrosísimos con tanta gente, ya que no los ves al intentar adelantar por las aceras.
El año que viene... ya veremos.
Saludos.
Acabo de leer el hilo de la San Silvestre 2012 de Oviedo en el foro Correr Asturias y no puedo estar más de acuerdo con las impresiones y vivencias que allí se reflejan.
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